La muerte de Nisman, inicialmente declarada como suicidio, fue luego investigada como un posible homicidio, pero aún no se han identificado responsables claros.

Aunque Hezbolá, aliado de Irán, ha sido apuntado por diversas investigaciones como responsable tanto del atentado a la AMIA como del atentado dos años antes contra la Embajada de Israel en Buenos Aires, ambas causas siguen abiertas en la Justicia argentina, la cual, además, mantiene órdenes de captura contra varios exfuncionarios iraníes por el ataque a la mutualista judía.