Según detalló el capitán, intentó salvar a sus pasajeros, pero las dos víctimas, al ingresar a la embarcación, se negaron a llevar sus chalecos salvavidas, creyendo que afectaría a sus fotos y bronceados.

Tras el trágico hecho, el cuerpo de Faria fue recuperado por los Bomberos Marítimos de Brasil tras quedar a la deriva en el mar, según explicó la policía.

En el caso de Amorium, su cuerpo apareció arrastrado por la corriente en la costa de la playa de Itaquitanduva, a varios kilómetros del lugar del siniestro, una semana después.